Crossfit en el agua. Beneficios, Ejercicios y Más

Está claro que en los meses de más calor da más pereza ir a entrenar cada día al box, pero con esta nueva versión deportiva no tendrás excusa.

Cuando llega junio y el calor empieza a apretar en el box se hace muy difícil terminar el wod con dignidad. Es normal, ¡no te preocupes! Al fin y al cabo es un deporte de alta intensidad que requiere mucho esfuerzo y con el calor se hace más complicado dar todo de uno mismo.

Sin embargo, con crossfit en el agua descubrirás que esta nueva práctica será mucho más refrescante y divertida que su versión tradicional. Será la mejor opción para los meses en los que el sol brilla de forma implacable.

Eso sí, la indumentaria ha cambiado. Ya no entrenarás con pantalones, camiseta y zapatillas. Ahora cambiarás esta ropa deportiva para lucir bañador, gafas y gorro de natación.

Aunque en un sitio de playa también puede llevarse a cabo, lo cierto es que la piscina será mucho más cómoda para la realización de la clase. Así, no tendrás que sumarle a la dureza del wod ningún factor playero relacionado con las olas, la sal o las corrientes del mar.

Muchos gimnasios ya organizan clases en sus piscinas de crossfit bajo el agua y no solo en verano, también durante todo el año.

¿En qué consiste el crossfit en el agua?

Aunque ahora hablamos propiamente del crossfit en el agua, lo cierto es que introducir un elemento como el agua en crossfit no es nada nuevo ya que en algunos Crossfit Games hemos visto como algunas pruebas se desarrollaban en el agua.

Buena prueba de ello es el wod Run Swin Run de los Crossfit Games de 2017. Se trató de una prueba por tiempo consistente en correr 2,5 km, nadar 500 metros y correr 2,5km. Para dejar, sin duda, a los participantes sin respiración.

La duración de la clase es igual que en el box. En aproximadamente 45 minutos se llevará a cabo la misma fórmula: calentamiento + técnica + wod.

En esta versión veraniega se combinan ejercicios que se harán tanto dentro como fuera del agua. Así fuera del agua se pueden realizar burpees, sentadillas, flexiones, dominadas o abdominales mientras que dentro se puede combinar la natación con ejercicios ejecutados con pesas o ketlebells para hacer, por ejemplo, largos en la piscina cargando con peso.

Puede parecer muy duro pero recuerda que en el agua el peso siempre es menor que fuera, por lo que la ketlebell pesará bastante menos que en el exterior y podrás cargarla con mayor facilidad siempre y cuando ésta no sea de demasiados kilos.

También tendrás un entrenador como lo tienes en el box. Tu coach te ayudará a que no descuides la técnica ni dentro ni fuera del agua. Aunque dentro de agua el riesgo de lesión es menor que fuera, no quiere decir que no pueda suceder y que sufras alguna. Por ello, la ayuda de tu entrenador te será, como siempre, de gran ayuda. Sigue sus consejos para tener un rendimiento progresivo y conseguir tus objetivos físicos.

Ideal para auténticos crossfiters y para principiantes

Tanto si ya tienes cierto nivel como si estás adentrándote en el mundo crossfit, su versión acuática es para ti.

Para los más pro, realizar ejercicios de alta intensidad de crossfit en el agua les ayudará a trabajar la resistencia y la potencia.

El agua proporciona una gran resistencia debido a su densidad. Si tienes un alto nivel de entrenamiento y mantienes este ritmo en el agua verás cómo mejoras la resistencia y la potencia. Los músculos de todo tu cuerpo se activarán y necesitarán de más energía que fuera del agua, por lo que es una modalidad deportiva que funciona fenomenal como “quemagrasas”. Necesitarás de más calorías para ejecutar cada ejercicio por la resistencia que sentirás al hacerlo.

Eso sí, practicarás en menor medida otras capacidades como el equilibrio o la flexibilidad.

Por otro lado y para los más “novatos” en este deporte, el agua les facilitará la tarea ya que la densidad del agua tiene la capacidad de reducir el peso corporal, aunque eso sí también aumenta la resistencia como ya hemos comentado. Es, en definitiva, una de cal y otra de arena. No obstante, podrán evolucionar de forma progresiva sin sufrir tanto como en el box o por lo menos estando mucho más frescos.

Al igual que el crossfit convencional, el acuático está dirigido para públicos de todas las edades. Los más pequeños podrán divertirse mientras practican deporte en el agua y los más mayores podrán ponerse a trabajar en cualquier ejercicio sin miedo a sufrir una lesión puesto que el riesgo es menor.

Ciertos ejercicios tendrán un carácter más terapéutico y actuarán como rehabilitadores de determinados grupos musculares, ¡descúbrelo!

Beneficios del crossfit en su versión acuática

Es un deporte muy completo e intenso al estar combinado con la natación. Analicemos sus principales beneficios:

• Incrementarás la resistencia gracias a la fuerza del agua. Su densidad hace que los movimientos sean más lentos y costosos, pero a cambio hace que los pesos sean más ligeros.

• Mejorarás la respiración. Al combinarse con la natación es necesario que sepas realizar bien la respiración al hacer ejercicios en el agua para ganar ese “fondo” que necesitas.

• Su práctica te servirá también fuera del agua. No solo ganarás resistencia, también desarrollarás más potencia que te ayudará en tus wods realizados en el box.

• Puedes realizar un ejercicio intenso dentro del agua sin generar demasiado impacto en músculos o articulaciones. El riesgo de lesión disminuye aunque las agujetas están garantizadas.

¿A qué esperas para probar esta versión acuática del crossfit? Estamos seguros de que te gustará tanto como el crossfit tradicional y que comenzarás a practicarlo tanto en verano como en invierno.

Experimenta sus beneficios y trabaja todos tus músculos también en el agua. ¡Mucho ánimo crossfiter!